Senador Navarro: Veredas de la Región del Biobío son verdaderas trampas para las personas mayores

Por Gonzalo Cruzat Bizama.- Tres son los principales problemas que tienen que enfrentar los aproximadamente 350 mil adultos mayores de la Octava Región del Biobío, según el senador Alejandro Navarro: En Salud, la falta de capacidad para recibir a personas dependientes que requieren de Establecimientos de Larga Estadía; el alto costo del pasaje en el transporte interurbano; y el mal estado de las veredas en las ciudades, “que son verdaderas trampas para los adultos mayores”.
Respecto de la atención de salud para los adultos mayores, en la capital de la región, Concepción, tanto la hospitalaria, como la red de salud primaria municipal, a través de consultorios y postas rurales, es relativamente activa, pero la carencia de establecimiento para recibir a adultos mayores no autovalentes es la mayor necesidad que tiene la región.
El senador Navarro, que representa a la Región del Biobío desde 1990 en el Parlamento, hizo ver que dicha falencia obliga a las familias a buscar solución para sus familiares que son absolutamente dependientes, lo que ha hecho una proliferación de hogares de acogida para tales pacientes mayores, pero que éstos no tienen autorización de los organismos de salud y sanitarios y tampoco son fiscalizados, y en los cuales los pacientes no lo pasan bien.
Ante tal situación, el parlamentario considera indispensable que estos hogares sean fiscalizados, que cuenten con autorización del Servicio de Salud y que puedan tener algún subsidio del Estado. Además, hizo ver que así como se están construyendo viviendas para los inmigrantes, se debería construir también para adultos mayores.
COSTO DEL TRANSPORTE
Según el parlamentario, el costo del transporte interurbano es una de las principales quejas de los adultos mayores de la Región del Biobío. No así del transporte urbano, principalmente en la ciudad de Concepción, donde existen convenios, mediante los cuales las personas mayores tienen rebaja en el valor del pasaje en la locomoción colectiva y también en el Bío-tren, pero la rebaja es menor. Además, este medio de transporte no tiene conectividad, por lo que los adultos mayores que ocupan este medio, tienen que pagar un pasaje adicional para llegar al lugar requerido.
El parlamentario precisó que el gasto en transporte, principalmente el interurbano, llega hasta un 20% de la pensión de la mayoría de los adultos mayores que viven en distintas comunas de la Región y que tienen que viajar constantemente a la ciudad de Concepción por temas de atención médica.
El senador Navarro dijo que en el Congreso se encuentra en estudio un proyecto de ley que busca establecer un subsidio para rebajar los pasajes, a través del Fondo de Apoyo Regional (FAR), que está radicado en la Comisión Especial del Adulto Mayor del Senado. Hizo ver que dicho Fondo dispone de 35 mil millones de pesos al año, destinado a mejorar la calidad del transporte público (recursos que provienen de la Ley Espejo del Transantiago). Dijo que año 2018, tales recursos se ocuparon, en un 90%, en la construcción de cuarteles de la PDI, en postas rurales y en diseño de puentes.
CIUDADES POCO AMIGABLES
Para el senador Navarro, el estado de las veredas de las calles de las ciudades de la Octava Región “son verdaderas trampas para los adultos mayores”. Hizo ver que “hay mayor preocupación en el mejoramiento de las calzadas de las calles, para los vehículos, que en la reparación de las veredas, por donde caminan las personas y principalmente los adultos mayores. En ese sentido, considera indispensable establecer un programa especial de reparación de veredas, para darles seguridad a los adultos mayores y evitar caídas, que suelen dejarlos postrados por mucho tiempo.
El parlamentario adelantó que hay un compromiso del gobierno regional sobre la materia, “pero todavía las ciudades no son amigables con las personas mayores”. En este sentido, hizo ver que las ciudades no fueron diseñadas para los adultos mayores, por lo que ahora requieren de una reurbanización.
Navarro adelantó que este tema lo planteará en la discusión de la Ley de Presupuesto de la Nación para el 2020, para destinar recursos para el mejoramiento de las veredas de las ciudades, para que las personas puedan transitar por ellas sin temor a caerse y sufrir quebraduras, como suele ocurrir con frecuencia. “En esta materia se tiene que dar a los adultos mayores el mismo trato que, hasta ahora, se les está dando a los automóviles…!”, ironizó el senador.