Por Gonzalo Cruzat Bizama.- El Papa Francisco exhortó a los jóvenes a liberarse de la dependencia del teléfono móvil, lo que calificó “como una droga”. Tal exhortación la hizo durante un discurso a los estudiantes de un Instituto público de Roma.
El Sumo Pontífice llamó a liberarse de la dependencia del móvil. Dijo que “los teléfonos móviles son un gran progreso y son de gran ayuda, que hay que usarlos, pero si uno se convierte en esclavo del teléfono pierde su libertad”. Sostuvo que cómo existen las dependencias, como la de las drogas, también “el teléfono móvil es una droga, que puede reducir la comunicación a simples contactos”.. Afirmó que “la vida es comunicar y no sólo simples contactos”.
EL CELULAR ESTÁ PASANDO LA CUENTA
Hace algunos días se dio a conocer un estudio realizado en Australia, en el cual se advierte que la llamada “tecnoferencia” (término que se ha comenzado a usar para aludir a cómo el celular, entre otras tecnologías, está alterando los hábitos y la salud de las personas y que no sólo interrumpe su vida cotidiana y que no menos del 24% de las mujeres y 15% de los hombres están viviendo una experiencia similar, con menos horas de sueño y menor rendimiento laboral. Además, más del 8% de mujeres y hombres reconoce dolores y molestias que atribuyen al uso de teléfonos móviles.
El estudio australiano, como lo consignó El Mercurio, se basó en encuestas realizadas a más de 700 personas usuarias de teléfonos móviles en Australia, cuyos datos fueron comparados con un sondeo similar realizado en el 2005. El fenómeno de mayor uso del teléfono móvil por las personas crece según ciertos grupos etarios, puesto que las personas entre 18 y 24 años, la cifra aumenta al 40,9% y llega al 23,5% entre quienes están entre los 25 y los 29 años.
El uso de teléfonos inteligentes en Australia, que tiene una de las tasas más altas del mundo, con un 88% de las personas adultas con acceso a un celular. Chile no se ha quedado atrás, puesto que tiene una tasa del 81% de la población que posee un celular y lidera su uso en América Latina, por lo que se considera que el estudio australiano y sus resultados son homologables, por lo que expertos considera que somos una sociedad que está conectada permanentemente y en la que no hay una conciencias clara sobre el impacto que los celulares pueden causar en la vida cotidiana.
La realidad que se ve en Chile en el uso del teléfono móvil es impactante, porque personas de todas las edades, desde menores hasta de la Cuarta Edad, usan el teléfono móvil no solo en su residencias, sino que cuando caminan en las calles, en la locomoción colectiva y no son pocas las personas que lo hacen, incluso cuando van manejando. Con razón el Papa Francisco sostiene que el teléfono móvil “es como una droga”.
