¡¡¡Hablemos del amor…!!!

Se dice que al ser el amor algo tan complejo y polifacético, resulta casi imposible encontrar palabras exactas para definirlo, porque no es posible abarcar todo lo que éste significa. Por tal razón, se define como un sentimiento de afecto universal que se tiene hacia una persona, animal o cosa.
También se define como “un sentimiento de atracción emocional y sexual que se tiene hacia una persona”.
La Real Academia Española lo define como “Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia necesita y busca el encuentro y unión con otro ser”.
Según el diccionario ilustrado de la RAE, amor es “afecto por el cual busca el ánimo, el bien verdadero o imaginario, y apetece gozarlo. Pasión que atrae un sexo hacia otro. Blandura, suavidad”.
También se le define como un sentimiento de vivo afecto e inclinación hacia una persona o cosa a la que se le desea todo lo bueno (amor al prójimo, amor a un ser querido, amor a la Patria).
Otra definición: Sentimiento de intensa atracción emocional y sexual hacia una persona con la que se desea compartir una vida en común.
Se sostiene que junto con el hombre, el amor ha ido cambiando a través de la historia. En la Edad Media fue abordado desde dos perspectivas: La sexual y la sentimental. La primera se concentra en las pasiones y se le llamaba “amor mundano”; a la otra se le llamaba “amor cortés”, porque atendía al acto contemplativo.
En el libro “La Celestina”, de Fernando Roja (que es de nuestra época), se retrata a través de sus personajes la lucha entre estas dos modalidades de amor.
EL AMOR EN LA LITERATURA
Para los literatos, escritores y poetas, el amor tiene distintos significados:
El escritor y poeta alemán, Premio Nobel de Literatura de 1946, Hermann Hesse, dice que “supe que ser amado no es nada. Que amar, en cambio, lo es todo”. Para el argentino Leonardo Cohen,” el amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males”. Para el escritor, poeta y filósofo indio, Rabindranath Tagore. “El amor es el significado último de todo lo que nos rodea. No es un simple sentimiento, es la verdad, es la alegría que está en el origen de toda la creación”. Para Santa Teresa de Jesús, “si en medio de las adversidades persevera el corazón con serenidad, con gozo y con paz, eso es amor”.
Desde la Psicología, J. Sternberg, ha señalado tres componentes del amor: Intimidad, sentimientos que promuevan el acercamiento; la pasión (fuerte deseo de unión); y el compromiso (para conservar y reproducir el amor).
Amor y poesía: Hay una relación estrecha, por la sensibilidad del lenguaje, porque la poesía es ternura de todas las cosas. La relación entre amor y poesía es muy íntima.
DISTINTOS TIPOS DE AMOR
Amor filial: Afecto entre padres e hijos; Amor fraternal, afecto entre hermanos; Amistad, cercano al amor fraternal, y es un sentimiento que nace de la necesidad de los seres humanos de socializar; Amor al prójimo, equivale al amor fraternal y al predicado por la Biblia. Amor autopersonal, amor hacia uno mismo, cercano a la autoestima y al narcisismo. Amor clandestino, el que practicaron Romeo y Julieta y miles y miles de parejas más y que como los otros amores, se sigue practicando.
AMOR EN LA VEJEZ
Amar es una necesidad de todos los seres humanos y también de sentirse amado, en cualquier momento de su vida, y la vejez no queda al margen. De hecho, encuestas realizadas a adultos mayores sobre el amor, el 62,6% cree en la posibilidad de enamoramiento en esa etapa de la vida.
Se sostiene que el amor en la vejez es más tranquilo y menos apasionado que el de la juventud y que más bien se convierte en compañía, como lo reflejó el Premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez en su libro “El amor en tiempos de cólera”.
Estudiosos de este tema sostienen que cualquier persona puede vivir su última etapa de vida feliz, gracias al valor que aporta el amor y consideran que cultivar el amor en la tercera edad es un verdadero regalo, porque no hay mejor medicina para vivir feliz que la ilusión que aporta un corazón correspondido. Se afirma que el amor otorga al adulto mayor un sentido trascendente a su vida.